XIV

[SAN SHI! AJO]

el pasado no pasa           pisa          los talones tallados en la acera
dominical delos delphos ojos rubios en un centro comercial costanera
bañado de smog [[Santiago Oriente D.F.]] bañado de monoxicarbónica
dígase humo gris industrial y veneno de pólvora calavérica
el que escribe se dirige al Portal Lyon entre saltimbanquis
de un digase león de acero y estatua como las leyendas hispánicas
si nisiquiera hay en Chile no      hay leones en la sabana
hay pudúes, ni tampoco cóndores, hay perros y moscas 
troqueleras zumbando los puestos de empanada frita de hormigón
compré un cuaderno y un chupete y un enemistado libro de Parra
antilector cruza la calle con ojos puestos en su letra y no en las cebras
el moco loco de la señora y su tanque yunque de nervios en las piernas
siento en el asiento de adelante saciandose de puestos fronterizos en la pléyade 

de subte marciano y negro, túneles como la vía uterina del nacimiento humano y húmedo

Barrio Bellavista libros con las manos tras la nuca en la vereda a 6 lucas a 5 500
a 5 y de a 4 y una cucharada intelectual de baba de vendedor 
es que Sartre es una pieza de museo, y Freud aún se lo pelean los niños académicos
de brisa a media tarde, tarde entera, de vientecito entre las entrete piernas 
escribo y son monerias rufianescas de una temporada estiva y ruiseñora


del metrotren [                                                        ] Estación Baquedano
me siento en la cafetería a beber mi cerveza en des ayuna 
Un sol calefactor que da calore y el friole: frijole
cuatro tercios de sol y medio octavo de invierno desubicado
Santiago de Chile un ombligo cochino por el que la bruma brota como el pus de la herida